Una información dedicada al teórico y más que discutible "progreso" de la provincia de Cuenca me ha movido a reabrir este blog con el título que rotula este artículo de opinión, básicamente porque aquella no pasa de ser otro macabeo y tendencioso corta-pega salido de las arcas del PSOE de este territorio con fines esencialmente electorales. Así ha entrado ya en campaña dentro de nuestras tierras, con el peculiar estilo ajado y cansino tan ahogante como agarrotado. Un simple encuentro de la cúpula más que desgastada de ese partido en Las Mesas para poner micrófono al director de la Escolanía de la Parálisis de Cuenca, el mandamás de esa poco inspirada coral en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que tiene en Cuenca de capataz al déspota co-director José Luis Martínez Guijarro. La sobaquera de ambos asoma en el reporte desde el primero hasta el último párrafo.
La parálisis política es un fenómeno que afecta a diversos gobiernos y sistemas políticos en todo el mundo. Se refiere a la situación en la que la toma de decisiones y la implementación de políticas se ven obstaculizadas o ralentizadas debido a conflictos internos, falta de consenso o situaciones complejas.
En España, la parálisis política ha sido un tema recurrente en los últimos años. Por ejemplo, durante la formación de coaliciones gubernamentales, las diferencias entre los partidos pueden dificultar la aprobación de leyes y presupuestos. La reciente caída de los Presupuestos Generales del Estado para 2024 debido al adelanto electoral ha generado tensiones entre las fuerzas políticas. El partido Sumar ha acusado al PSOE (Partido Socialista Obrero Español) de falta de voluntad para avanzar en la agenda social y legislativa. Además, la superprimavera electoral ha aumentado la preocupación en torno a la agenda legislativa del gobierno. Aunque las cuentas públicas para 2024 se han pospuesto, se espera que se mantenga una “agenda ambiciosa” para abordar los desafíos sociales. Esto último está por ver, y más en Cuenca, ante el remilgo y la poca creatividad política de los políticos presentes en el "encuentro" señalado.
En el conjunto español, el bloqueo político ha afectado la implementación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género. A pesar de su aprobación, tres de cada cuatro medidas propuestas aún no se han adoptado debido a la parálisis política. Y, ya más cerca, la falta de acuerdos entre los partidos políticos también afecta a las comunidades autónomas. La parálisis política asfixia a estas comunidades y dificulta la implementación de medidas sociales, digan lo que digan las avecillas que cantaron las tediosas canciones que aburren de tanto repetirlas, y, simultáneamente, dejan a esta comparsa con la boca seca y el cerebro empantanado, al demostrar su enorme falta de creatividad pública.
Hoy en día vivimos en una sociedad donde las opiniones y los discursos están a la orden del día, las redes sociales, televisión y periódicos permite que la opinión de cualquier persona pueda ser escuchado por todo el mundo, esto nos da una herramienta increíble para comunicarnos y expresarnos, evidentemente los beneficios son inmensos pero tenemos que hablar también del lado oscuro y es que las opiniones e ideas están cada vez más polarizadas y esto ocurre en todos los ámbitos, pero en el ámbito político esta polarización nos afecta más a nuestro día a día, están saliendo cada vez más partidos extremistas que dan a la ciudadanía la posibilidad de radicalizarse.
De esto último, que palpamos ya en la presentación de las candidaturas el 28 de mayo de 2023 en Cuenca, durante el periodo electoral autonómico y local, parece que no se dieron por enterados los cantantes de Las Mesas. Parece que estos, que ni ven ni observan la parálisis política real, no atisban las consecuencias significativas que la misma puede tener en la gobernabilidad y la capacidad de un gobierno para abordar los desafíos y necesidades de la sociedad.
¿Hablaron acaso y dieron partitura a la brecha social en la que se halla metida España, donde los ricos son cada vez más ricos y los pobres son más pobres, pues la pandemia asimismo ha provocado un grave efecto en la sociedad y su economía?. La corrupción de Koldo y "adjuntos", no cantada por la Escolanía en Las Mesas -al menos cara al público-, eludió el címbalo pandémico de 2019, cuyo sonido permite oír que la gente con mejor economía ha podido aguantar y seguir adelante, en cambio los trabajadores con empleos más precarios han tenido graves problemas para sobrevivir; de ahí que las colas para repartir alimentos se hayan multiplicado y además por personas que nunca han tenido la necesidad de ello. Por tanto, señores cantarines de Las Mesas, aquí va un consejo: dense una detenida vuelta por Cáritas, para ver lo mucho que les queda a todos Uds. por hacer en Cuenca en materia de política social, inversiones públicas, infraestructuras generales, reestructuración administrativa, diálogo social auténticamente democrático, participación política abierta, etcétera, etc. No lancen ninguna campana al vuelo porque está tan resquebrajada que suena poco y mal.
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